La memoria de las lágrimas

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Todo se lo robamos, no le dejamos ni un color ni una sílaba:
aquí está el patio que ya no comparten sus ojos.
Jorge Luís Borges




La memoria  de las lágrimas
se ha disuelto en el lago
sueño final de los hijos de la tierra.
Desde las profundidades
gimen seres con ojos globosos
rostros amuecados de viejos lamentos.


Atrapados
claman todavía:
Deben encontrarnos
en el fondo
en el lecho.


Nuestras voces aguardan el día.
Y ustedes
beben nuestros gritos bañados de cloro.


Deben encontrarnos.









(fotografía: Cenote en la Riviera Maya de Dania)


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