Cuando las heridas llevan flores blancas



A María Belén Reyna, siempre en mi recuerdo.



Hoy que el ciruelo despereza un llamado de hamaca,
blancos plumones florecen en las heridas del árbol.
Otro ciclo aguarda
engalanando sus brotes de recuerdos.
Una niña sonríe en mi ternura
y crece en el tiempo
en el cariño encendido
en la luz del ronroneo compartido.


Es Belén que sopla otros nacimientos
en nuestras manos
como briznas de agosto
sonriendo
desde el aliento fugaz
de todos nuestros sueños.


©Susana C.Lobo

Del libro inédito: Por la Señal de la Luz.
Oct. 2001

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
...para suspirar. me encantaste.
besos

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